FRÁGILES
Se trata de intervenir la
palmera instalando en la misma un corpóreo en el que habremos pegado
anteriormente un gran número de huevos de gallina vacíos.
El ejercicio comienza pidiendo al alumnado que
traiga al centro un huevo que habrán
vaciado en casa con la ayuda de la familia. Estos huevos no sólo han
sido vaciados, también “personalizados” por el alumnado (pintados, decorados
con pegatinas, con sus nombres…). En el colegio iremos colocando en la
estructura que más tarde se incorporará a la palmera sin dañarla ni
modificarla. A la vez se les pedirá que traigan pequeñas ramas para rodear la
base del árbol a modo de nido. En la estructura también figurarán churros de
flotación para natación, dotando a la intervención de más color y de cierta
inocencia infantil.
Concepto
de la instalación “Frágiles”.
Pretendemos simbolizar la
fragilidad de la infancia. El huevo, elemento que implica el principio de vida,
promesa de crecimiento, es frágil. Hay que cuidar que esos huevos lleguen a
salvo y, lo más interesante, sigan a salvo durante su exposición. Ésa será la
labor del público, haciéndolo parte del hecho artístico. Los huevos, a pesar de
estar agarrados a la palmera, de la seguridad aparente ante la gravedad, pueden
romperse. Como la infancia, que aún bajo la protección de la familia, bajo la
sombra de la sociedad, es también frágil, física y emocionalmente.
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